A la hora de escoger una opción para obtener agua caliente sanitaria en casa, son muchos los usuarios que se preguntan si les conviene adquirir un termo eléctrico o un calentador de gas. Por ello, antes de solicitar presupuesto, conviene tener claras sus diferencias, ventajas e inconvenientes.
¿Cómo funciona un calentador de gas?
Los calentadores de gas son dispositivos que producen agua caliente sanitaria (ACS) en el hogar al instante y de forma ilimitada, pasados eso sí de uno a dos minutos tras abrir el grifo. Será en el momento en el que abramos el grifo cuando el aparato empiece a calentar agua mediante quemadores a gas.
¿Cuándo es recomendable?
El calentador de gas es adecuado para grandes consumos, ya que resulta mucho más económico que la electricidad. Además, un consumo alto de agua caliente requiere que no nos quedemos sin ella en mitad de un baño, por ejemplo, lo que hace desaconsejable el empleo de termos eléctricos, especialmente para familias numerosas.
Inconvenientes de la caldera de gas
Como hemos avanzado, el agua caliente no sale inmediatamente. Esto significa que debemos esperar a que el calentador haga su función. Y es que es necesario un caudal mínimo de agua para que el calentador se ponga a funcionar, lo que puede traducirse en un malgasto de agua innecesario. Para evitarlo, podemos aprovechar ese agua aún no calentada que sale del grifo para fregar o regar las plantas, ayudándonos de un recipiente para almacenarla y que no se eche a perder.
¿Cómo funciona un termo eléctrico?
Por su parte, el termo eléctrico se compone de un depósito de agua donde se calienta mediante una resistencia eléctrica. Cuando el agua alcanza la temperatura deseada, la resistencia se apaga y el material aislante es el elemento encargado de mantener el agua caliente. A medida que se va usando – y gastando – el agua caliente, entra agua fría en el termo y la resistencia eléctrica se pone en marcha de nuevo.
¿Cuándo es recomendable?
El termo eléctrico es perfecto para hogares de pequeño consumo. Porque si bien el depósito puede ser de gran capacidad, el agua caliente es limitada, a diferencia de las calderas de gas.
Inconvenientes del termo eléctrico
Los termos eléctricos son más fáciles de instalar y mantener, siendo asimismo más económicos que los calentadores a gas. Sin embargo, el coste de la electricidad para quienes cuentan con termo eléctrico es mayor que los de gas. En consecuencia, especial atención debemos prestar a la hora de planificar y calcular el consumo de agua caliente, bien sea para no quedarnos tirados como para ahorrar en la factura.
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